Ya no basta con presentar títulos académicos, ahora los headhunters tienen el objetivo de encontrar altos ejecutivos con una visión más global, competencias muy específicas y liderazgo.
Cuando el reto es captar a un gerente de alto nivel, los cazadores de talento tienen encomiendas distintas a las que recibían una década atrás, porque las empresas de hoy se enfrentan a un mundo globalizado y cada vez es más frecuente que abran oficinas en varios países.
Para ocupar posiciones de mandos medios, las organizaciones están solicitando líderes con capacidad de influencia, proactivos, flexibles, que se adapten rápidamente a los cambios, que sea gente comprometida y dispuesta a dar la milla extra, así lo demuestran los resultados de un sondeo que realizamos entre los más destacados cazatalentos (headhunters en inglés) de República Dominicana y Centroamérica.
Paula Leñero, gerente de Capital Humano de Deloitte, expone que a niveles más altos el liderazgo es una característica fundamental. “Muchas veces esos líderes tienen que manejar el negocio en distintos países, entonces es importante esa capacidad de multiculturalidad, el entendimiento del negocio, la visión estratégica y la mezcla de orientación al resultado, pero balanceado, con orientación hacia la gente”, dice.
También se valora ampliamente que ese alto ejecutivo esté al día con los avances tecnológicos y proponga ideas para automatizar los procesos de la empresa.
Paula expone que uno de los retos que enfrentan las organizaciones es lograr atraer y retener al mejor recurso humano. “Es ahí donde se encuentran de frente con el tema de liderazgo, de tener esa capacidad de pensar en la gente, pero no de una manera paternalista, sino más bien como una forma de desafío que pueda desarrollar a la gente y darle oportunidades de crecimiento”.
La respuesta a la interrogante sobre qué debe hacer una empresa para mantener a su lado a un buen gerente es uno de los aspectos que preocupa bastante a las organizaciones. Paula indica que el punto crítico es el compromiso: “En la medida en que la gente se enamora de lo que está haciendo se queda, de lo contrario se va. Ese amor lo logramos tomando en cuenta que la gente se sienta bien remunerada, el tema compensación es importante. Ese gerente busca oportunidad de desarrollo, sentir que no está perdiendo el tiempo, sino que está aprendiendo, que le están dando espacio de aportar también”.